
- ¡J de joder! Que largo es.
- ¡J de joder! Que Bueno es.
- ¡J de joder! Que bien escrito está.
- ¡J de joder! Que estaba haciendo, sin leer esto.
- ¡J de joder! Este libro es pata negra. Esperemos que el segundo sea igual, por no mencionar el tercero, si algún día sale.
Es que es increíble. Este libro llega al lector. Te entra tan adentro con respecto a su personaje, que te abruma. Sufres, cosa mala. Patrick se ha obcecado en joder una y otra vez a su personaje, antes de hacerlo un Héroe ¡ O no! Kvothe ya ha nacido.¡Héroe! Siendo un prodigio desde niño.
El libro es el primer dia de tres, recitando las memorias del Héroe de leyenda, que es nuestro protagonista. Un inicio muy flojito, introductorio, nos centra en la ubicación aislada de la posada que regenta Kvothe con su aprendiz «Bast». La posada es su lugar de paso en travesía entre poblados. El altercado de un ataque a uno de los lugareños por una araña gigante ha matado su caballo y a el lo ha dejado con heridas serías antes de que este acabase con la araña. Kvothe hace socorro a las heridas del lugareño y posteriormente mientras investiga la proximidad de dichas arañas, nos llevará al encuentro con el cronista, que ha sido asaltado en el camino. El cronista a quien le han robado el caballo, continúa a pie, porque no le queda más remedio, hasta que ve durante el anochecer una fogata donde conocerá a nuestro protagonista que va hacer frente a unas arañas con cuchillas en vez de patas, las causantes de las heridas del lugareño y uno de los escasos clientes de su posada. El cronista es la persona que va a escribir su vida en tres días a petición de Kvothe, son la introducción de la biografía o historia real de sus andanzas. Kvothe también llamado el asesino de reyes. reacciona con resuello a las habladurías hacia su leyenda y que son erróneas. El cronista viene como anillo dedo para relatarlas de primera mano.

He aquí, como en la taberna se sientan tranquilamente, el cronista, Kvothe y su aprendiz Bast. A quien invitará su señor a unirse.
Día Uno:
La tropa de los padres de Kvothe, no son simples feriantes, si no, que pertenecen a la corte, del Señor de Greyfallow. Kvothe tiene una madre de sangre noble, pero su padre la embauco, con su encanto y dominio de la música. Con unos padres guapos y enamorados, tiene una infancia buenísima. Todo transcurre sin contratiempos, hasta, la llegada al grupo de un Arcano, llamado Abenthy. Se inicia la trama de su historia. La enseñanza de nuestro protagonista en las artes, transcurre con una eficiencia superdotada a nivel académico, ya que sus padres lo han adoctrinado muy bien incluso en la música. Por su padre músico, actor y su madre experta en el dominio de las lenguas.
Alerta spoiler. Al resumen general de la obra.
Hasta que el nombre del Viento y hablar a este lo lacra. Ya que la historia que hace nombre, ocurre cuando Kvothe, espía al Arcano hablando con el Alcalde y alguacil de uno de los pueblos donde paran. El grupo de feriantes y el Arcano coinciden en las fiestas de un pueblo, como vendedor de mejunjes curativos y servicios. Kvothe hace presencia de la magia, ejercida por el Arcano. Quién llama al viento, con tanta fuerza, que el impulso que ejerce en el fluido gaseoso, levanta el carromato del Arcano. Liberando al Arcano de la presión del Alcalde y el alguacil, por la falta de licencia en sus quehaceres. A partir de aquí el Arcano hace vida junto a los feriantes. Por un tiempo limitado, ya que la razón de quedarse es la capacidad de Kvothe en ser un lumbreras.
Pero.
El viento, maldice a nuestro protagonista con la desgracia de su mentor, el Arcano deja de enseñarlo. Por el peligro que esto conlleva. kvothe en un ejercicio llama al viento utilizando de alar su respiración, Casi se mata el mismo. Las enseñanzas de él y la rapidez de asimilación de nuestro protagonista en las artes de la magia, provoca que el arcano acabe sus enseñanzas con un Kvothe de escasamente doce años. El Arcano aprovecha una parada en un pueblo de ruta del grupo, donde conoce a una viuda, que necesita enseñanzas para su hijo. En la despedida el Arcano le deja un libro de afinidad a Kvothe, donde le alienta a que se defienda bien en la universidad y que se enorgullezca de ello. Le recuerda que sea cauteloso y loco, tal como recomienda su padre. Rothfuss es brutal en pequeñas metáforas, dichos que enriquecen la obra a niveles insospechables.
La muerte de sus padres y la totalidad del grupo de feriantes por unos entes mitológicos, llamados los Chandrian, desencadenan, la orfandad del mismo. La supervivencia de este siendo solo un niño.
Kvothe, no dejará de pensar, porque los Chandrian, han matado a todo el grupo y llegará a la conclusión de una canción que estaba componiendo su padre, fue el desencadenante. Ya que explica la historia de Lanre, de la religión de Tehlu, el hacedor. Este es el enigma principal y quiénes son los Chandrian.
El se salva de la matanza porque su madre lo envía al bosque a buscar hierbas, el tiempo suficiente para que sus padres puedan tener un tiempo para ellos y estar juntos. A la llegada todo está ardiendo, todos muertos. El olor a pelo, piel, quemados. Y los chandrian aún presentes lo ven. Porque aún no se habían ido. Uno de ellos con pelo blanco, ojos negros se acerca hacia el para, imaginemos, acabar con el, pero en la hoguera, un encapuchado sin rostro con fuego azul, apresura de que deben marcharse. Dejando con vida a nuestro protagonista.


El luto consume a Kvothe, consigue recoger lo justo para adentrarse en el bosque y sobrevivir, junto al más preciado instrumento de su padre. Un Laúd que utiliza para calmar su pesar. Malvive, cazando conejos, bebiendo agua de los riachuelos, se le rompe una de las cuerdas de su preciado Laúd, toca y se especializa con una cuerda menos. Hasta que decide ir a la ciudad y buscar cobijo.
El ruido de un carromato atrae a Kvothe y lo espolea para salir del bosque. El conductor, un viejo granjero y su hijo, lo ve y lo llama, preguntándole si va a la ciudad. A lo que Kvothe asiente.
Lo llevan a la ciudad de Tarbean. Pero este es solo el inicio de su infortunio, o su aprendizaje. Kvothe en su primer día en la ciudad se pierde buscando donde comprar la cuerda rota de su Laúd y es atacado por una banda de chavales de la calle. La destrucción de su Laúd delante de él y la paliza. Anula la posibilidad de volver con el granjero y su hijo que lo esperaban hasta las últimas horas del atardecer. En vez de esperanza acaba la primera noche de casi 3 años en Tarbean, durmiendo dolorido, detrás de unas cajas al final de un callejón. Con los pensamientos de lo bueno que es poder dormir junto a gente que te quiere.

Que chocante y dura es esta parte de la novela. Kvothe se convierte en un vagabundo, donde lo único que importa es sobrevivir, al frío, al hambre, a la enfermedad. Todo el potencial del chico se ve aplastado por el gasto desmesurado de esfuerzos en sobrevivir que limita el potencial de esta. Si no es porque sabes que Kvothe es una leyenda, explicando sus crónicas, el desasosiego te inundaria, ya que no verías ni una pequeña luz al final del camino.
Tarbean enseña a Kvothe a rapiñar, hace amistad con una persona buena llamada Trapis, Sacerdote de Tehlu que cuida de los huérfanos y al menos entrega pan a estos a cambio de su ayuda al cuidado de los otros huérfanos.
Trapis salvará a Kvothe de la muerte, cuando este se aventure a la zona alta de la ciudad, durante los festejos de medio-invierno, las representaciones del demonio Encannis y Tehlu hacen a la ciudad más peligrosa que nunca, con las gentes enmascaradas. Para poder sacar más dinero en limosnas, Kvothe, decide y comete el error de subir a la zona alta. Lo hace al final de los festejos para evitar el peligro inicial de euforia de estos, pero un alguacil, le dará una paliza de muerte, de la que se salva de milagro, porque yace sin fuerzas tirado en la nieve, la muerte no tardará mucho en llegar, pero unos enmascarados de demonios, lo ven tirado y consiguen levantarlo. Le dan dinero para recuperarse y se van. A duras penas llega Kvothe a la parte trasera de una posada donde pide una manta y comida, a las dos niñas que están afuera descansando del trabajo. Ellas lo ayudan y le devuelven el cambio del preciado dinero que le dieron los desconocidos. Le quieren ayudar pero Kvothe, no acepta y se dirige a su escondrijo secreto entre los tejados de dos edificios, el hueco que queda con la repisa de estos con un tercer edificio más bajo. Este escondrijo, le salva la vida y le da una habilidad magistral para escalar. Ya que ni siquiera Kvothe recuerda como después de empezar a delirar por la enfermedad, llega a bajar del tejado e ir a dónde Trapis, el sacerdote de Tehlu, lo salva.

Pronto vendrá la parte que a mí personalmente más, me ha chocado y que tiene relación con los Chandrian. Kvothe se enterará de que alguien cuenta historias a petición de los oyentes por una módica limosna en una posada en la zona de los muelles. La zona más baja, donde actúa la banda del jefe más mayor que le dio la paliza en el primer dia y rompió su Laúd.
La religión de Tehlu y Lanre. Skarpy es la persona que relatará las historias de Lanre o almenos la conexión de la fábula con los chandrian a petición de Kvothe. Esta parte será contada en dos días de visitas a la posada alternos.
Me voy a centrar en detallar perfectamente la fábula de la religión de Tehlu, Encannis y Lanre por la transcendència directa con la trama y los Chandrian. La obra està perfectamente detallada en la wiki, con mucho material detallado. Aquí.
Este momento es top, por parte de Rothfuss y su trasfondo. Es el instante en que uno ve claro que este libro es una maravilla. Y sale una «J»de Joder qué bueno es.
La historia de Tehlu y Encannis: Ver capitulo veintitrés del libro. El Nombre del Viento.

Hasta Aquí la parte uno del nombre del viento. Es mucho material y si quiero abarcar la religión esta cuenta con dos relatos internos y una aclaración extra.
Esta vez, It’s a kind of Magic!